
Frecuentemente los dueños o administradores de una PYME enfrentan problemas operativos que traen consigo perdidas en la empresa; robos hormiga, mermas en exceso, perdida de equipo, etc., son algunos ejemplos de ello.
Para poder minimizar estos problemas es necesario fortalecer los controles internos de la empresa, pero ¿Cómo se logra hacer esto? Primero definamos qué son los CONTROLES INTERNOS: Son procesos diseñados para proporcionar seguridad en la operación, se establecen para evitar que los problemas operativos no sucedan, y son preventivos, no
correctivos.
Revisemos los procesos definidos en nuestra empresa y en caso de no contar con ellos, es un buen momento para asesorarnos y documentarlos. Para cumplir con los controles internos y contar con evidencia de su cumplimiento, las Sanas Prácticas Administrativas recomiendan que los procesos contemplen la integración de expedientes diarios (electrónicos o físicos) que ordenen los soportes documentales que emanan de la operación. Existen múltiples metodologías para documentar procesos, en ellas se definen las acciones y los soportes que permiten contar con evidencia del cumplimiento del proceso; en mi experiencia, la metodología de las normas ISO (Organización Internacional de Normalización) es una de las mejores.
Pero no perdamos de vista que el CONTROL INTERNO contemplado en los procesos no trabaja solo, debe estar integrado en los sistemas automatizados con validaciones que vigilen el cumplimiento de las normas definidas, y en su caso, alarmen y soliciten la intervención de un supervisor para aplicar la corrección correspondiente.
Hasta la próxima.
EL BUEN ADMINISTRADOR KONEXUS
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